Hemos sobrevivido un año más la Navidad y el Año Nuevo.
¿Te gusta la Navidad? ¿Te gusta el Año Nuevo? No me gusta en absoluto el periodo de Navidad y el Año Nuevo. Es un sinfín de comercialismo ofensivo y festividades exageradas en un periodo muy corto. Y el sentido religioso ha sido perdido desde hace muchos años.
Odio las canciones de Navidad que oyes en todas partes incluso en los supermercados comenzando en el mes de octubre; me entristecen las iglesias vacías en un periodo en el cual se supone que hay que celebrar el nacimiento de Jesús; me disgusta el proceso desesperado de compras de regalos en los días justo antes de Navidad; me aburren las fiestas innumerables pero aparentemente indispensables con amigos y parientes. No quiero comer y beber tanto. Me da asco el pavo. No quiero ver una vez más películas viejas en la televisión como “Sueño con una Navidad Blanca”.
Tengo una sugerencia para solucionar el problema del comercialismo e irreligiosidad. Los regalos deben ser solo para niños de menos de 21 años y solo para cumpleaños. Es decir nada de regalos para la Navidad. No quiero que el nacimiento de Jesús sea conectado en la mente de los niños con regalos.
Tengo también una solución para reducir la intensificación de las festividades. Debemos celebrar la Navidad en diciembre como es normal pero el Año Nuevo en junio para separar las festividades. ?Te parece extraño celebrar el Año Nuevo en verano? Es lo que hacen en Australia desde siempre.
Feliz año Nuevo y Prospero Año Nuevo.