Esta semana la presidenta de México anunció una propuesta sobre la jornada laboral. Si se convierte en ley, la reforma cambiará de manera fundamental los derechos de los trabajadores.
Según un artículo adjunto aquí, las estadísticas indican que hay 2 millones de mexicanos que trabajan 58 horas por semana, casi 3 millones que trabajan entre 49 y 57 horas por semana, y casi 9 millones que actualmente pasan entre 41 y 48 horas de trabajo cada semana.
Los partidarios de la reforma presentan la propuesta como un paso firme hacia una vida laboral más justa. Si el gobierno aprueba los cambios, el horario laboral disminuirá gradualmente, a partir de 2027 hasta 2030, cuando la jornada laboral alcance las 40 horas. Hay también varias propuestas sobre las horas extraordinarias permitidas, el derecho al descanso y a los días festivos pagados, etcétera.
Afortunadamente, ahora estoy jubilada, pero recuerdo la introducción aquí en el Reino Unido del Working Time Directive en 1998. Pienso que introdujo un límite de 48 horas en promedio por semana, medido cada 17 semanas, y que tuvimos derecho a la exclusión voluntaria (opt out).
Según la presidenta, los sueldos de los trabajadores no disminuirán y la productividad del país aumentará gracias a las reformas. Parece una situación en la que todos ganan.
¿Piensas que la presidenta tiene razón o tienes dudas?
Fuentes: