Casi ha llegado la temporada de las comedias musicales navideñas que son un tipo de obra del teatro para el entretenimiento de la familia. Fueron realizadas en Inglaterra alrededor del siglo XVI y se las montaba por todo el Reino Unido e Irlanda sobre todo durante la estación del Adviento y del año nuevo.
Las comedias de hoy incluyen canciones de la lista de éxitos, con la letra cambiada para ser más pertinente al público que asiste. Hay un montón de chistes de interés actual, por ejemplo, burlarse de Boris, Brexit o las barbaridades de ciertos miembros de la familia real. A veces, los chistes pueden ser un poco verdes.
También, hay mucha comedia bufonada y baile. Siempre hay un actor principal que se viste de mujer al estilo de una gran dama. Y, por supuesto, no nos podemos olvidar del villano que siempre recibe al final lo que merece. Generalmente, el tema de la obra es de un cuento de hadas popular tal como Ali Baba y los Cuarenta Ladrones o la Cenicienta. En mí opinión lo mejor de la obra es que el público participa tanto como los actores, cantando junto con la música, gritando avisos al héroe (¡está detrás de ti!), y por supuesto abucheando al villano.
Cuando era niña cada año solíamos ir a una comedia navideña organizada por la iglesia. Mi favorito actor de entonces se llamaba Stanley Baxter, un cómico escocés, que siempre hacía el papel de la gran dama, vestida de los vestuarios más elegantes y extravagantes.
Es costumbre que las escuelas primarias lleven a sus alumnos a ver una comedia musical durante el mes de diciembre antes de las vacaciones navideñas. Algunos colegios montan sus propias obras con ambos profesores y alumnos representando los papeles para el entretenimiento de sus parientes, vecinos y amigos.
Cuando mis niños eran jóvenes, cada año la empresa donde trabajaba, montaba, para los niños de los empleados, una fiesta navideña culminando con una visita de papá Noel. Después de la fiesta íbamos a un teatro de la comunidad para ver una comedia musical navideña. Hoy en día, ya que están adultos, a mis hijos no les interesan las comedias navideñas. Sin embargo, espero que algún día, no muy lejano, pueda llevar a mis nietos, si los tengo, para que disfruten de esta gran tradición británica.
Fuente: The Herald - sábado 23 de noviembre - las 15 mejores comedias musicales de Escocía