Sin duda conocéis al presentador escocés, Paul Murton, que ha hecho muchos programas de televisión sobre sus grandes recorridos de las tierras altas, las islas y los lagos de Escocia. Más recientemente, ha centrado su atención en los grandes ríos como el Tay, el Spey, el Clyde y el Tweed, todos los cuales son muy bien documentados. Sin embargo, ha viajado a pie y por agua a lo largo de otros ríos menos conocidos, por ejemplo, el río Irvine, que atraviesa el este y el norte de Ayrshire.
El nacimiento del río Irvine se encuentra cerca de Loudon Hill, un antigua tapón volcánico, de gran interés histórico, ya que Robert the Bruce y William Wallace lucharon aquí. Cerca de la colina la escultura ‘El Espíritu de Escocia’ conmemora su pasado en guerra.
El valle de Irvine fue famoso por su industria especializada en encajes, y contaba con muchas encajeras muy calificadas de origen belga. El pueblo de Newmilns en particular, se destacó por sus encajes y allí la industria ha sido revivida en una fábrica donde se diseña y se suministra encajes a todo el mundo y especialmente para dramas de época.
El río continua su recorrido a través de Kilmarnock, una ciudad que merece su plática propia debido a su pasado histórico, por ejemplo, su transformación por la Revolución industrial y su larga asociación con el whisky Johnnie Walker. También, se puede destacar su papel en la publicación del primer libro de poesía de Robert Burns.
Finalmente llegamos al mar a través del puerto de Irvine y el río desemboca en el fiordo del Clyde. Irvine es un pueblo muy heterogéneo en cuanto a su arquitectura más histórica y sus barrios de nueva construcción. En mi opinión la mejor parte para visitar es el puerto renovado donde se encuentran el Museo Marítimo, numerosos cafés y el excelente Centro de Artes.
¿Os gustaría pasear por este río serpenteante o no?
Fuentes:
Grand Tours of Scotland's Rivers