El jeepney era el tipo de transporte público más popular en las Filipinas, pero debido a que emiten nubes de humo negro y son inseguros para los estándares de hoy en día se enfrentan a la extinción inevitable.
Este colorido símbolo de las Filipinas está siendo tristemente reemplazado por taxis y por los aburridos minibuses. El jeepney refleja el carácter Filipino, ingenioso, colorido, amistoso y emprendedor.
Hace diez años las calles de alguna ciudad en las Filipinas estaban llenas por hordas de jeepneys muy decorados y era común verlos cruzar a través del tráfico caótico para competir por la atención del cliente.
Las rutas están pintadas a los lados, y todavía se les puede llamar desde cualquier lugar, los conductores perceptivos reconocen cualquier gesto, aun el más insignificante y estarán felices de cruzar cuatro carriles de tráfico provocando un caos para recoger al pasajero.
Se sube a bordo a través de la puerta trasera y se puede sentar en dos asientos de banco. La tarifa puede ser difícil de entender para el visitante, pero son muy baratos y los pasajeros se asegurarán de no dejarse estafar. Ruidoso, lleno de gente y contaminante, pero muy divertido.
Turismo en Las Filipinas (un documental en español)
How to ride the jeepney