Recientemente quedé con mis antiguos compañeros de trabajo ya que en otras cosas querían saber “cómo es ser jubilado”. Pues, después de considerar todos los puntos a favor y contra la jubilación llegué a conclusión que el mejor beneficio es no tengo que levantarme temprano. Cuando trabajaba tenía que levantarme a las 5.30 pero ahora puedo dormir hasta a las 8.00 y como consecuencia me siento mucho mejor.
Vivimos en una época donde el sueño no es visto como importante por algunos de nuestros líderes en el trabajo que lo consideran una pérdida de tiempo y algo que debe evitarse. Mi ex jefe solía jactarse de que solo necesitaba dormir cinco horas cada noche y esperaba que yo hiciera lo mismo, aunque en aquel entonces solía dormir 6 horas cada noche. Escuché a un Ted Talk por profesor Russel Foster, profesor de neurociencia, y él explica que los recientes avances en neurociencia han demostrado la importancia de sueño regular y adecuado en nuestra salud y eficacia. Por ejemplo, muchos accidentes de tráfico son causados por conductores que se duermen. También, ha sido descubierto vínculos interesantes entre los enfermos mentales y la falta de sueño. Esto tiene profundas implicaciones para la sociedad moderna, incluso sugiere que el trabajo por turnos y nocturno son ineficientes.
Ojala que estos descubrimientos no sean ignorados y que la próxima generación adopte un enfoque más educado para dormir. Es irónico que las ventajas de dormir bien solo se descubran cuando uno se jubila. ¡Buenas noches!