Recuerdo que hace unos meses hablamos de los idiomas, y de los varios sistemas para traducir lenguas extranjeras. Hoy día quiero agradecer a Google por la aplicación Google Translate. Me ha salvado la vida durante los últimos días. Como sabéis, Robert está muy ocupado en este momento con el grupo de huérfanos ucranianos. Llegaron en Escocia por avión el miércoles pasado durante la noche, y los recibimos en Callander con el equipo del ayuntamiento a las 2 de la mañana.
Durante el viaje, los niños y sus madres fueron acompañados por dos chicas que habían pasado su niñez en uno de los orfanatos. Ahora son adultos, y no van a vivir con los otros. Por suerte, alguien había organizado alojamiento a largo plazo para ellas en una familia escocesa, no lejos de Edimburgo. Aun así, el viaje desde Polonia fue tan rápido y la llegada del grupo fue tan temprana, que la familia no estaban preparada, y por eso las chicas vivieron con nosotros en Stirling durante unos días.
Robert podía comunicarse sin problemas con ellas en ruso, pero yo me sentía perdida. Durante nuestras charlas juntos, Robert solía hablar conmigo en ruso también, y yo tenia que explicar “no hablo ruso”. Por suerte las chicas nos mostraron Google Translate, con sus varias posibilidades – por voz, por escrito y con la cámara que fue muy útil, por ejemplo, para traducir el menú en un restaurante.
Durante su visita nos dimos cuenta que, para otras familias anfitrionas y para sus invitados, el idioma puede representar un gran obstáculo. ¡Menos mal que existen estas aplicaciones milagrosas!