Una de las activistas justificó sus acciones haciendo algunas preguntas como: ‘¿Qué vale más, el arte o la vida? ¿Vale más que la justicia? ¿Qué nos preocupa más, la protección de una pintura o la protección de nuestro planeta y de la gente?’ También estaba enojada por el costo de vida más alto que impide que la gente pobre pueda calentarse una lata de sopa. Hay que admitir que estas preguntas son muy pertinentes e importantes. No obstante, ¿la destrucción de una obra tan icónica ganará corazones y mentes para su causa? No lo creo.
Atacar obras de arte no es nuevo, y ‘La Gioconda’ en el Museo del Louvre tuvo la suerte de escapar de los daños recientemente ya que la pintura también estaba protegida por un cristal. En Escocia, en 1961 el cuadro de Salvador Dalí ‘Cristo de San Juan de la Cruz’, fue también atacado y muy dañado, aunque fue restaurado con éxito. Normalmente, se encuentra en todo su esplendor en la Galería de Arte Kelvingrove en Glasgow, pero por el momento está en préstamo en Bishop Auckland, County Durham.
Fuente: El País -Cultura