Hacía muchísimos años que no teníamos un mes de mayo tan soleado. He aprovechado del buen tiempo para lograr mi meta de cumplir 10 mil pasos al día y, quizás a la vez, adelgazar un poco para que la ropa de verano me quede mejor. Así, voy de paseo casi todos los días por el campo alrededor de mi pueblo. Lo que he observado, además de la belleza del paisaje que está en plena floración, es la desgracia de nuestras caminos y carreteras, los cuales que están llenos de baches.
La mayoría de estos baches fueron causados por el invierno severo del año pasado, pero la lástima es que nuestro ayuntamiento no tiene dinero para hacer las reparaciones necesarias. Desde que llegó al poder en el 2007, el SNP no ha dejado a los ayuntamientos subir los impuestos municipales. Al principio, a los escoces les gustaba esta norma. Sin embargo, hoy en día, más de diez años, hemos visto el impacto de tal política del gobierno. Además de no poder subir los impuestos, los ayuntamientos han afrontado el otro reto de recibir cada año menos fondos para proveer los servicios para los cuales son responsables. Por lo tanto, hemos visto no solamente cortes en servicios, como por ejemplo la cerrada de muchas bibliotecas o la falta de reparaciones a los baches, sino la pérdida de mucho empleo. Según el periódico “The Guardian”, los ayuntamientos escoceses han sufrido cortes de 5,2% en los últimos doce meses con la pérdida de 2,200 puestos de empleo.
Quizás, ya es la hora de abandonar esta política y subir los impuestos municipales para que podamos volver a tener servicios de alto nivel.
Fuente: Audit-Scotland.gov.uk, The Guardian.com
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