Cuando discutimos la plática reciente de Robert sobre las marcas icónicas de Escocia, nadie mencionó la sopa escocesa que se llama Cullen Skink. A mí me gusta mucho esta sopa cremosa hecha con eglefino ahumado, patatas y cebollas.
Hace unos años, durante un viaje largo en bicicleta bajo una lluvia torrencial, no sentimos verdaderamente aliviados al encontrar una taberna en las orillas del Lago Linnhe cerca de Port Appin (ver el enlace abajo). Recuerdo que todos nosotros comimos Cullen Skink para el almuerzo. El personal muy amable del restaurante nos permitió secar nuestra ropa mojada delante del fuego y la sopa estuvo deliciosa.
El séptimo Campeonato Mundial de Cullen Skink tendrá lugar el 17 marzo en el pueblo de Cullen. Habrá dos concursos de cocinar durante el día, uno para la versión tradicional de Cullen Skink y el otro para una versión inventiva, con un nuevo giro (Cullen Skink with a twist). El campeonato está abierto a los cocineros amateurs y profesionales. Los jueces eligen los competidores vencedores basado en los ingredientes, técnicas culinarias y el sabor.
En el concurso con un nuevo giro, el ´giro´ debe complementar la sopa sin superar el sabor de la sopa. ¿El ingrediente más interesante hasta ahora? El chocolate rallado encima de la sopa.
El origen del nombre 'skink' es la palabra gaélica para 'esencia'. Al principio, Cullen Skink era un caldo hecho con los raspados de carne de res, de las patas delanteras del ganado. Sin embargo, era demasiado caro comprar esos raspados. Cuando Cullen llegó a ser un centro próspero para la pesca del arenque, el pueblo se especializaba en la producción de eglefino ahumado. Por consiguiente, la sopa deliciosa nació.
¿Tenéis alguna asociación entre un plato y un lugar o una experiencia memorable?