Hace 70 anos cuando el Partido Comunista llegó al poder el nuevo gobierno tomó el control de las fábricas, las empresas y la tierra como es normal en un estado comunista.
Tras la muerte de Mao y el fracaso total de su política económica un nuevo líder Deng Xiaoping llegó al poder con una nueva estrategia que era muy innovadora. Deng transformó el modelo económico de China con una política de liberalización. Esta política produjo un sorprendente boom de la economía china y los líderes que le siguieron a Deng continuaron con el mismo plan. Hoy China es el principal gigante comercial del mundo; produce y exporta más que nadie. En términos de paridad del poder adquisitivo ya es la nación mas rica del globo.
Al mismo tiempo que se volvió casi capitalista China queda, en términos políticos, un país profundamente comunista en el sentido que es controlado por un solo partido político -los comunistas- y para mantenerse en el poder se convirtió en realidad en un estado policial.
Hoy día este modelo capital-comunista se enfrenta a dos grandes desafíos- uno interno y uno externo. La amenaza interna es que hay indicaciones que la gente no está contenta con la intensificación del totalitarismo bajo Xingping y no va a soportarlo sobre todo cuando la economía no ofrece más los beneficios del pasado. La economía va hacia bajo, el marcador más claro de esto es la llamada “crisis del cerdo”. El costo de este alimento básico para los chinos ha crecido un 50% en solo un año y la gente está enfadada.
La amenaza externa es por supuesto el conflicto con los Estados Unidos. Este gigante económico y militar, tiene miedo de los avances de China, desde la década pasada, y para frenarlos han iniciado una guerra contra el comercio dominante de China. Es evidente que esta guerra va a causar grandes daños a la economía china y debilitar aún más el apoyo de los chinos para el modelo capitalista- comunista. Me parece que eso es el objetivo fundamental de los Estados Unidos. La amenaza externa aumenta la presión de la amenaza interna. Por eso será una guerra muy dura y larga con muchos daños por ambos lados. Y nosotros- los otros ciudadanos del mundo- tendrán que observar desde un lado la lucha entre estos dos elefantes evitando lo más posible ser pisados bajo sus pies enormes durante prolongadas batallas.