En una nueva excavación en Pompeya, la antigua ciudad romana enterrada bajo las cenizas del volcán Vesubio, nuevos frescos fueron descubiertos representando figuras míticas griegas como Helena de Troya y el dios Apolo así como la sacerdotisa Casandra. Estos frescos se habían pintado sobre las paredes negras en un gran salón de banquetes. Aparentemente, las paredes eran negras para evitar que se viera el humo de las lámparas de aceite colocadas en este salón donde se reunía la gente de clase alta para entretenerse teniendo banquetes y conversaciones después del atardecer.
La excavación actual, iniciada el año pasado, es la más grande en una generación y revela mucho sobre la gente y la cultura del antiguo imperio romano. Lo sorprendente es que aproximadamente un tercio del área de Pompeya queda por excavar. Las cenizas volcánicas y los escombros que cubrieron a Pompeya durante la erupción en el año 79 d.C. formaron una capa protectora. Excavar es una operación delicada ya que el área de excavación puede ser frágil, y el trabajo implica no sólo el descubrimiento de artefactos y obras de arte, sino también la conservación y la restauración del sitio.
Hace muchos años estuve de vacaciones con un grupo en Sorrento en Italia y pasamos un día en Pompeya. Fue realmente emocionante caminar por las calles descubiertas y ver lo que había logrado durante las diversas excavaciones. Nosotros fuimos en verano, y aunque el sitio estaba lleno de turistas, todavía era posible moverse libremente e imaginar cómo debió haber sido Pompeya en el pasado.
¿Habéis visitado Pompeya? Si es así, ¿Cuáles fueron vuestras impresiones? ¿Qué opináis de los nuevos frescos?
Fuentes: La segunda fuente es más larga, pero contiene más información detallada.
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