La semana pasada hablamos de los niños superdotados y mencioné la estrella de tenis, Naomi Osaka que se había retirado del Abierto de Francia para proteger su salud mental. Antes de los acontecimientos recientes, yo no sabía mucho de ella. Naomi nació en Osaka en 1997. Su padre es haitiano y durante sus estudios en Nueva York viajó a Japón donde encontró a su futura esposa. Naomi pasó sus primeros tres años en Japón con su familia y con sus abuelos maternos. En los torneos ella representa Japón, y adoptó el nombre de su ciudad natal como apellido. Pese a su nacionalidad, vive en Estados Unidos donde ha pasado gran parte de su vida.
Su padre no es tenista, pero en 1999 se dio cuenta del éxito de las hermanas Williams, y esto lo inspiró a planear un futuro deportivo por sus niñas. Se decidió a seguir el ejemplo de Richard Williams y como él, tuvo éxito como entrenador, trasladando la familia a Florida para darle buen uso de los servicios deportivos allí. Naomi ganó un torneo importante a la edad de 16, y rápidamente se convirtió en la atleta más comercializable del mundo.
Parece ser una chica inteligente, cortés y reflexiva, que se involucra en asuntos serios como la desigualdad. Lo que no sabíamos hasta hace poco era que ella sufría problemas de índole personal, incluso largos periodos de depresión. Durante los últimos días ha explicado a su público por Twitter que quiere distanciarse del deporte por un rato. Parece que ella no puede soportar las entrevistas durante los torneos. Se asusta de presentarse frente a personas que no creen en ella, y considera que algunas de las normas de los torneos son erróneas.
La reacción de los demás ha sido mixta. ¿Qué piensas de los comentarios de las autoridades de los Grand Slam, los atletas y los patrocinadores?