He conservado mi interés en el sector automotriz, ya que he trabajado en él durante mi vida laboral. He visto un cambio gradual aquí en Filipinas respecto a los coches fabricados en China. Hace unos años, la mayoría de los coches vendidos aquí eran coreanos o japoneses. También, había una pequeña cantidad de coches estadounidenses y europeos, principalmente alemanes. Ahora, la mayoría de los coches nuevos son chinos como BYD y MG (era una marca británica que ahora es completamente china).
Aunque no tengo
intención de comprar un coche aquí, siempre comento sobre estos coches con el
personal de ventas. Las diferencias más notables de los coches chinos son sus
precios sorprendentemente bajos y las características estándares que suelen
cobrarse como extras en coches de otros países. Un buen ejemplo es el Jetour
T2, un vehículo todoterreno similar al Land Rover Defender. Su precio en
Filipinas equivale a 16.000 libras, mientras que un Land Rover Defender 90
similar cuesta unas 60.000 libras. El Jetour T2 parece estar bien hecho e
incluye las últimas tecnologías, incluidas versiones eléctricas. Aún no está disponible
en el Reino Unido, pero cuando llegue será un formidable competidor de los
modelos Land Rover y Toyota.
Los fabricantes
europeos y japoneses ya están sintiendo los efectos de la competencia de los
coches chinos. Muchos modelos europeos y japoneses todavía se consideraban
aspiracionales, pero ahora parecen amenazados por estas marcas chinas. Aunque
el consumidor se beneficiará de esta competencia, tendrá graves consecuencias
para las fábricas europeas, incluidas algunas en el Reino Unido. Me preocupa el
impacto en la industria automovilística en el Reino Unido, pero la relación
calidad-precio también es muy importante para la consumidor. A la hora de
comprar un coche nuevo nos encontraremos ante un dilema: ¿antepondríamos el
precio al país del fabricante?